Tuesday, June 22, 2010

ANGELITO

...Y la injusticia explotó en un orgasmo al ver a los poderosos adorarla. Yo mientras consumía mi vida viendo la cuenta atrás de mi fecha de caducidad. Un angelito apareció en la noche para acariciarme y huir tras la oscuridad. Y allí me quedé pensando en la brevedad de mi tiempo, tiempo que no controlo. Tiempo que un día quise que se acabara y que hoy necesito para ver a mi angelito. Porque un día ella regresó y dejó su equipaje en mi corazón. Corazón que yo empecé a tatuar con su nombre para que mi mente supiera en quien tiene que pensar. Y ella aparecía envuelta en un vestido de aurora boreal y con el aroma del jardín del edén. Y mi alma estaba tan llena que la distancia la hacía sangrar. Sus fotos empezaron a aliviar el paso del tiempo, pero como compensar el beso de la piel, las caricias de los labios y el polvo salvaje de dos miradas. Miradas que se ríen del silencio que se siente inferior a nosotros. Y entonces lo marcado no se hizo para nosotros, las tradiciones son obsoletas cuando dos almas gemelas se encuentran en este mundo. Dos estrellas que bajaron a la tierra para juntarse un día en las constelaciones de la amistad. ¿Es amistad, amor, sexo, mimos? es todo junto y no es nada, es necesidad. Es compartir y querer para uno solo, es la confianza y los celos, es cada uno de los latidos que produce mi corazón. Es pensar en una carita dormida mientras el teléfono no suena. Despertarse sobre tus labios y dormir bajo tu portal, bajo una noche estrellada y una vuelta a casa silenciosa. Son veinticuatro horas juntas y una semana sin verte. Sentarse en el arcén de la vida y caminar por entre los coches del destino. Es ser atropellado y levantarse sin un rasguño. ¿Y por qué tus abrazos no son eternos? ¿Por qué he de esperar viendo como los minutos se ríen de mí? Es una realidad de mentiras, una gran mentira que es la única verdad. Dejé plantada a la soledad para regalarte un anillo, por dejar trabajar mi mente esperando sonidos. Sonidos que son el oxígeno que me da vida. La misma vida que se emociona en un entrecruzar de dedos, en un abrazo desnudo o en la mordedura de un labio. Y me tengo que ir, y tú te quedarás, pero sólo tu cuerpo porque tu alma conmigo vendrá. ¿Cómo has hecho para que mis puertas lleven todas a ti? Que tu voz se convierta en la mejor melodía y tu cara en ese lugar que siempre quise ver. Ahora te veo y tú no a mí, o quizás sí. ¿Qué diferencia hay entre unos ojos cerrados y unos abiertos? Si ambos quieren ver lo mismo. ¿Y qué ocurre cuando nuestras mentes coinciden en la distancia? ¿Nos une o nos aleja? ¿Por qué tememos tanto la necesidad? Los golpes de la inmadurez son los más difíciles. El miedo al dolor nos aparta de nuestra esencia. Pero yo ya no tengo miedo, me agarro al presente, ignoro el futuro y dejo que el pasado me guíe. Me abrazo a tu nombre y pongo el cronómetro. Quizás se pare, yo creo que no, pero la vida es breve y muy grande mi amor. Un amor que ya no entiende de papeles ni de falsos te quiero, un amor que se alimenta de detalles y crece con miradas. Porque en los ojos escribí mis sentimientos y los enseñé a leer en los tuyos. El destino les hizo hablar la misma lengua, lengua que sólo entendemos tú y yo, y ocultamos a los demás. ¿Por qué la gente peca de amor narcisista? ¿Por qué las personas se vuelven trofeos? Trofeos que mostramos a nuestros amigos buscando envidias crueles. ¿Dónde está la autenticidad de un cuerpo? ¿Dónde el alma de una cara? ¿Dónde está la belleza interior en una sociedad angustiada? Sólo tengo tu amor, a la vida ya no le pido más nada.

Tuesday, June 8, 2010

BELLEZA

Y la belleza se instaló en los ojos del que estaba mirando. Y toda la subjetividad se hizo irrechazable. Sólo él podía disfrutarlo porque los demás ojos estaban cerrados. ¿Habrá belleza mayor? Pues depende del receptor. Yo lo veo redondo, los demás cuadrado, y es que no vemos lo mismo ni con los ojos cerrados. Yo me miro al espejo, y él me mira a mí, so somos la misma persona, tú eres sólo una imagen, y yo mira lo que viví. Pero muchas veces me ganas la partida y el resto de personas se olvidan de mi vida. Me miráis por fuera, yo lloro por dentro, y si te sonrío te vas más contento. Préstame tus ojos que yo me quiero ver, así quizás algún día al espejo me pueda parecer. Ahora la belleza se disfraza de mujer, yo no sé si veo el espejo o mi mismo parecer, es tan natural, que todo lo que hay dentro se vuelve de cristal. La belleza se vuelve frágil cuando su interior decide desnudarse sin permiso. Qué bonita eres cuando estás desnuda, que pena que nuestros ojos no estén preparados para verla. Porque una imagen vale más que mil palabras y nuestra foto nos tendió una trampa. Y el espejo no es tan guapo, ni tú eres tan feo y la distancia que os separa se arreglaría con una sencilla conversación. Ambos descubrirías el amor que os une, sois la misma sangre y en tus arrugas se escriben las bonitas cosas que os han pasado juntos. Si los demás apartan la mirada cuando pasáis de la mano, ese problema no es vuestro. Además la gente que os quiere, que es la que importa, se acercará y os dará un abrazo. Pero si decidís llevaros mal, sólo atraeréis el fantasma de la superficialidad que vagará siempre a vuestro lado, y un reflejo será el único amor de vuestra vida. Bueno belleza me despido de ti, espero que no sigas envejeciendo al lado de tus dueños, que seas independiente y te desnudes sólo ante quien te quiera mirar. Porque mirar es más fácil, pero nunca será propiedad de los impacientes.